Tras la clausura masiva de más de 45 bancas de lotería del consorcio La Primera por parte del Ministerio de Hacienda, su propietario, Fernando Cruz, se pronunció este lunes manifestando su indignación y rechazo por el accionar de las autoridades, lo que calificó como un atropello sin precedentes contra su empresa y la estabilidad laboral de sus trabajadores.
Según Cruz, esta situación tiene un carácter personal hacia él, ya que afirma operar bajo la legalidad requerida por el Ministerio.
A pesar de los documentos que respaldan a la empresa, el Ministerio de Hacienda ha insistido en que existen irregularidades en las operaciones del consorcio La Primera, aunque no ha proporcionado más detalles sobre las supuestas irregularidades.