El Papa Francisco destacó este viernes la importancia de mantener la dignidad humana en la práctica médica, al recibir a una delegación del Departamento de Odontología de la Universidad Federico II de Nápoles, en celebración de su 800° aniversario.
“La medicina no debe sacrificar la dignidad humana en favor de los intereses del mercado o ideologías. Su propósito es velar por la vida en todas sus etapas: naciente, sufriente y necesitada”, afirmó el pontífice.
Francisco exhortó a los médicos a «curar siempre» sin excluir a ninguna persona, abordando la salud de manera integral, con “cercanía, compasión y ternura”. También insistió en evitar añadir sufrimiento al paciente.
El Papa compartió una experiencia personal para ilustrar su mensaje: “Cuando tenía 20 años, me extirparon parte del pulmón. Más que los medicamentos, lo que más me fortaleció fue la mano de las enfermeras que, después de inyectarme, me tomaban de la mano. Esa ternura humana tiene un poder sanador increíble”.