Al menos 95 personas han muerto en inundaciones devastadoras en la región española de Valencia, y se teme que esta cifra aumente debido a numerosos desaparecidos, advirtió el gobierno.
De los fallecidos, 92 son de la Comunidad Valenciana, dos de Castilla-La Mancha y uno de Andalucía, indicó el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, a la televisión pública TVE.
Sin embargo, la región de Valencia enfrenta una grave crisis, con carreteras cortadas y zonas aisladas tras intensas lluvias que comenzaron la noche del martes. Algunos municipios registraron hasta 300 litros de agua por metro cuadrado en pocas horas, lo que ha dejado a muchos incomunicados.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, quien visitará la zona, instó a la población a mantenerse alerta y aseguró que no los dejarán solos.
Además, el gobierno ha decretado tres días de luto oficial. Los transportes aéreos y ferroviarios hacia la zona permanecen suspendidos, y el tren de alta velocidad entre Madrid y Valencia no volverá a operar hasta la próxima semana.
En tanto, la situación ha sido calificada como la catástrofe meteorológica más mortífera en España en más de 50 años. La Unión Europea ha ofrecido su ayuda en este momento crítico.
