La suspensión de los trámites consulares en la Embajada de Estados Unidos en Bogotá ha generado un fuerte impacto tanto en la comunidad colombiana como en los venezolanos que dependían de esta sede para gestionar sus visas y documentos de renovación.
Esta medida no solo afecta a los colombianos que buscan ingresar a territorio estadounidense, sino también a miles de venezolanos que habían encontrado en Bogotá una alternativa tras el cierre de la embajada de Estados Unidos en Caracas. Ahora, ambos grupos enfrentan incertidumbre y demoras que complican sus planes migratorios y de viaje.
El cierre de la sección consular deja en suspenso las solicitudes de visados y documentos clave, lo que aumenta la preocupación de quienes necesitan resolver con urgencia sus procesos migratorios.