El presidente de Colombia, Gustavo Petro, denunció la «grave» desaparición de «más de un millón» de armas y municiones de dos bases militares, que atribuyó a redes de tráfico vinculadas a grupos ilegales colombianos y extranjeros, que «probablemente» llegaron a Haití.
Según Petro, «hay más de un millón de municiones perdidas, entre municiones, explosivos, granadas, armas como misiles» provenientes de las bases militares de Tolemaida (centro) y La Guajira (norte).
La desaparición del armamento fue detectada en una inspección de inventario. Junto al ministro de Defensa, Iván Velásquez, y del comandante general de las Fuerzas Militares, Helder Giraldo Bonilla, Petro destacó que Haití está «a siete horas en lancha rápida de la base de La Guajira», uno de los arsenales robados.