Tras el colapso del puente que comunica el distrito municipal Don Juan con el municipio Yamasá, residentes de la zona se han visto obligados a improvisar una canoa artesanal para poder cruzar el río Ozama, cuyo caudal aumentó significativamente por las lluvias de la tormenta tropical Melissa.
El paso vehicular y peatonal por el puente quedó totalmente interrumpido, dejando incomunicadas a decenas de familias que dependen de esa vía para trasladarse hacia el municipio cabecera y comunidades cercanas.
Varios jóvenes de la zona construyeron una pequeña embarcación con materiales rudimentarios para transportar personas y provisiones, desafiando el peligro del fuerte caudal.
Las autoridades locales exhortaron a la población a evitar cruzar el río, ya que las corrientes representan un alto riesgo de arrastre debido al incremento del nivel del agua.
El incidente ha reavivado los reclamos comunitarios por la reconstrucción del puente, infraestructura que desde hace años presentaba deterioro sin recibir atención adecuada.