El propietario de una residencia que resultó incendiada tras la explosión de un artefacto o cohete experimental espacial que cayó accidentalmente sobre el inmueble, ha demandado al colegio por los daños a su propiedad.
La tarde del 6 de abril pasado, estudiantes del Instituto Iberia llevaban a cabo un ensayo científico para demostrar el funcionamiento de un cohete, un experimento que planeaban presentar ante la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA).
Sin embargo, la prueba se salió de control y el artefacto, al regresar a tierra, cayó sobre la residencia del ciudadano Nelson Mauricio Collado, ubicada en residencial Isabel G, al norte de Santiago y cerca del colegio Iberia.
Dicho incidente resultó en un incendio que prácticamente destruyó la residencia de Collado, quien ha presentado una demanda para ser compensado por todos los daños sufridos en su propiedad.
Los representantes legales de Mauricio Collado se dirigieron al Departamento de Denuncias y Querellas de la Fiscalía de Santiago, donde presentaron una acción legal contra los directivos del Colegio Iberia, quienes se niegan a responsabilizarse por los daños.
Francisco Javier Ascona Reyes, abogado del afectado, explicó que, dado que los propietarios del centro educativo no han respondido a su solicitud, se han visto obligados a acudir a las instancias judiciales y presentar una querella.
De igual manera, mencionó que los delitos que sustentan la querella están tipificados en la ley 58.69 sobre Daños a la Propiedad Privada, y en los artículos 434, 435 y 437 del Código Penal, que sancionan el incendio y la fabricación de explosivos, como en el caso del cohete.
El abogado añadió que para realizar el experimento no se contó con los permisos ni la supervisión de ningún organismo estatal encargado de regular estas actividades.
«En el lugar podría haber ocurrido una tragedia aún mayor si la casa hubiese estado habitada en ese momento», declaró Reyes.
«Si la familia de Nelson Mauricio Collado hubiera estado con su esposa e hijos, la historia habría sido otra; podríamos estar lamentando víctimas», dijo el abogado.
También, señaló que desde la zona de lanzamiento del artefacto suelen sobrevolar diversas aeronaves como aviones de carga, aviones ligeros y helicópteros.
Por ahora, la familia Collado Ureña no tiene dónde vivir debido al mal estado en que quedó su residencia como resultado del incendio.
