Continuando con los apresamientos de indocumentados, que intentan llegar ilegalmente hasta las grandes ciudades del país, fue interceptado un minibús con ocho extranjeros haitianos, en la carretera Manolo Tavares Justo, próximo al chequeo del Laurel, en la comunidad de Cañongo.
El conductor del minibús de la marca HYUNDAI, de color blanco, no pudo ser identificado ni apresado, ya que al verse acorralado emprendió la huida dejando el vehículo abandonado, con los indocumentados dentro.
Dicho vehículo fue interceptado por los miembros del (G-2) y uniformados del Ejército, pertenecientes al Décimo Batallón de infantería, que comanda el Coronel Genaro Agramonte Parra.
Los extranjeros, bajo un estatus migratorio irregular, fueron llevados a la Fortaleza Beller, con el objetivo de ser depurados y entregados a la Dirección General de Migración, para fines de deportación.