El Congreso salvadoreño, controlado por el partido Nuevas Ideas del presidente Nayib Bukele, aprobó el jueves la 40ª prórroga del régimen de excepción que suspende garantías constitucionales de la población, durante el cual más de 87,000 personas han sido detenidas acusadas de formar parte de las pandillas o de colaborar con estos grupos criminales.
En su solicitud, el gabinete de seguridad del presidente Bukele argumentó que ha identificado “intentos de reorganización” de pandillas, así como tráfico de drogas y extorsión.
La nueva prórroga, que permanecerá vigente hasta el 3 de agosto, recibió la aprobación de 57 de los 60 diputados. La diputada Claudia Ortiz, del conservador partido VAMOS, votó en contra. Los dos diputados del partido derechista ARENA se retiraron a la hora de votar.
Después de que las pandillas asesinaron a 62 personas en un solo día, el 27 de marzo de 2022, el Congreso aprobó un estado de excepción que, según organismos nacionales e internacionales, ha resultado en graves violaciones de los derechos humanos.
En agosto de 2024, Bukele dejó abierta la posibilidad de prescindir de la medida, pero ha continuado prolongándola, alegando que persiste la amenaza de las «pandillas» que durante más de tres décadas aterrorizaron al país centroamericano.
En un documento enviado al Congreso, el gabinete de seguridad destacó que las políticas de seguridad «han tenido un resultado exitoso que ha supuesto la reducción del número de homicidios y la captura de más de 87,100 terroristas». En los últimos 30 días, las autoridades han reportado 700 capturas más.