España cerró este año su peor verano turístico, al menos de este siglo.
Según los datos difundidos hoy por el INE, en los meses festivales llegaron 31,5 millones menos de turistas internacionales por la crisis sanitaria con respecto a 2019. En total, tan solo 6,2 millones de turistas.
Este desplome de visitantes durante los meses de junio, julio, agosto y septiembre también ha influido en el gasto turístico. Esta estadística se ha derrumbado un 86% con respecto al año pasado, llegando a los 6.007 millones de euros.