Durante años, la ciencia ha intentado descifrar el misterio detrás de las enfermedades psiquiátricas y su transmisión a través de generaciones. Gracias a los avances en genética y epigenética, hoy sabemos que los trastornos mentales como la esquizofrenia, el trastorno bipolar, la depresión y la ansiedad tienen un componente hereditario. Sin embargo, no es solo la genética la que juega un papel clave, sino también los factores ambientales que pueden activar o desactivar ciertos genes relacionados con la salud mental.
La pregunta es: ¿somos prisioneros de nuestros genes o podemos cambiar nuestro destino psiquiátrico?
Genética: ¿Qué heredamos de nuestros ancestros?
La genética ha demostrado que ciertas enfermedades psiquiátricas pueden tener una predisposición hereditaria. Estudios recientes han identificado más de 100 genes asociados con trastornos psiquiátricos, lo que sugiere que la vulnerabilidad a estas enfermedades puede ser transmitida de generación en generación.
Ejemplo de predisposición genética:
Si bien los genes pueden predisponer a una persona a desarrollar una enfermedad mental, no significa que la desarrollará con certeza, y aquí es donde entra en juego la epigenética.
Epigenética: Cómo el ambiente moldea nuestra herencia
A diferencia de la genética, la epigenética estudia cómo el ambiente y las experiencias de vida pueden influir en la activación o desactivación de genes relacionados con la salud mental.
Ejemplo de cómo la epigenética influye en los trastornos psiquiátricos:
Estos hallazgos indican que, aunque tengamos una predisposición genética a ciertos trastornos, las experiencias de vida pueden activar o desactivar esos genes.
Entender la interacción entre la genética y la epigenética en la salud mental nos lleva a una conclusión clara: el diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden cambiar el rumbo de una enfermedad psiquiátrica.
En Santiago y en Punta Cana, contar con un psiquiatra especializado en neurociencia y epigenética permite a los pacientes recibir una evaluación completa y personalizada. “No podemos cambiar los genes con los que nacemos, pero sí podemos modificar su expresión con el tratamiento adecuado.»
Los psiquiatras no solo evalúan la predisposición genética, sino que también trabajan en modificar los factores epigenéticos a través de terapias innovadoras, tratamiento farmacológico y estrategias de estilo de vida.
¿Somos esclavos de nuestra genética?
La respuesta es un rotundo NO. Aunque la genética puede predisponer a ciertas enfermedades psiquiátricas, la epigenética nos demuestra que el entorno, las experiencias de vida y los hábitos pueden cambiar significativamente el riesgo y la evolución de estos trastornos.
«Tus genes no definen tu destino. La prevención, el tratamiento y el entorno pueden reescribir tu historia de salud mental.»