El domingo 21 de septiembre, a las 4:27 P.M., acudí a la farmacia Extra, de la Juan Pablo Duarte, Santiago, a comprar una caja de Diovan 160mg X 28 y me explicaron que, al comprar la tercera, me correspondía una caja gratis.
Me incorporaron al club “PROGRAMA SOY SALUD” en la mañana del sábado 22. Acudo a adquirir el medicamento y le digo a una desganada empleada—algo regular en estos tiempos—que me correspondía una caja gratis.
Ella, después de cobrarme el fármaco, comenzó una infructuosa búsqueda en el ordenador y al no tener respuesta, supongo, llamó a otra empleada, quien sin dirigirse a mí, sino a su compañera, expresó que, quizás, me la podían entregar en diciembre.
Como hombre educado que soy, no pierdo mi tiempo discutiendo con empleados. Me marché y dije casi entre dientes que eso era un engaño.
Como tengo los medios para denunciar, lo estoy haciendo por los demás, porque en la misma farmacia y con otro fármaco me afiliaron a otro programa similar de otra compañía, por lo que no puedo asegurar si la idea es de las farmacéuticas o de la minorista.
Vivimos en un país de ladrones, aunque nos sumamos al coro de que los corruptos son los políticos. Aquí, con honrosas excepciones, no es ladrón quien no encuentra la plataforma para hacerlo.
La pregunta final es, ¿este engaño es de la farmacéutica NOVARTIS o de la cadena de farmacias EXTRA? No hablo por mí, no me interesa el medicamento gratis, le pediré a mi cardiólogo que me cambie el medicamento, ¡con eso estaré retribuido!