Este martes se conmemoran tres meses de la tragedia del Jet Set, que dejó 236 muertos y más de 150 heridos, sin que todavía se haya escogido el tribunal ni la fecha para conocer la apelación hecha por el Ministerio Público, con el fin de cambiar la coerción de garantía económica por prisión para los hermanos Antonio y Maribel Espaillat, propietarios del establecimiento siniestrado.
En una situación jurídica, el Ministerio Público apeló después de que el tribunal, presidido por la jueza Fátima Veloz, no acatara el pedido del órgano acusador, que solicitó 18 meses de prisión preventiva para Antonio Espaillat y prisión domiciliaria para Antonia.
Las autoridades tardaron dos meses y cuatro días en someter a la justicia a los hermanos Espaillat, lo que aumentó la percepción entre la población y los familiares de las víctimas de que el Ministerio Público había demorado demasiado en realizar el sometimiento.