El Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (INAIPI) informó que desvinculó al personal responsable de resguardar la integridad del menor de un año y 8 meses agredido en octubre pasado en el Centro de Atención Integral para la Primera Infancia (CAIPI) ubicado en el sector Arroyo Hondo de la provincia Santiago.
Dicha razón de esta desvinculación fue por negligencia, descuido e inobservancia de los protocolos de cuidado y protección que rigen la institución.
Según un comunicado ofrecido por la entidad, el proceso de separación del personal desvinculado se realizó conforme a los criterios establecidos en las normas internas, así como amparado en la reglamentación vigente que rige la función pública.
Además, indicó que entregó a la Fiscalía de Santiago todos los requerimientos solicitados para que se lleve a cabo el proceso investigativo de lugar, «al cual nuestro equipo jurídico da seguimiento» con informaciones que han sido suministradas a la familia en el tiempo oportuno.
El Inaipi dijo que, al igual que en otras ocasiones, la institución ha actuado de manera oportuna y responsable, activando los protocolos correspondientes y tomando las medidas internas establecidas.
Asimismo, en el caso en cuestión, la entidad colabora con el Ministerio Público, órgano que tiene a su cargo las investigaciones, acorde con las políticas de la tolerancia cero a la violencia y abuso infantil.
Según las investigaciones preliminares realizadas por el Inaipi, arrojaron como resultado que se trató de una agresión entre infantes, sin la intervención de adultos.
También dijeron que con su equipo multidisciplinario, al momento del hecho, se activó el abordaje correspondiente, acompañando a la familia del menor agredido en el proceso de evaluación médica.
Luego de la judicialización del proceso, el acompañamiento pasa al Ministerio Público.
Sin embargo, se brindó acompañamiento a las familias de los tres infantes involucrados en el hecho, con el objetivo de implementar estrategias que orienten, sensibilicen y contribuyan a la reducción de la violencia en el ámbito familiar, así como a minimizar el impacto de las conductas disruptivas y de autorregulación emocional.
El Inaipi reiteró que, en este y otros casos similares, ha actuado y actuará de forma responsable, condenando todo tipo de abuso y violencia, y priorizando la garantía de los derechos fundamentales de nuestros infantes.