El sur de Estados Unidos enfrenta una de las semanas más nevadas en años, con una tormenta invernal que afecta a más de una docena de estados.
La nieve, el aguanieve y la lluvia helada han transformado el panorama, dificultando los viajes y provocando caos en las comunidades.
En ciudades como Atlanta, las tiendas quedaron vacías antes de la tormenta, ya que los residentes se apresuraron a abastecerse de productos básicos.
Los estantes de sartén, leche, agua y carne quedaron completamente vacíos.