
Ser madre en nuestro tiempo, significa tener la capacidad de motivar y de rescatar a nuestros hijos, a los esposos, como a los compañeros de trabajo, a los profesores de nuestros hijos, e incluso a los vecinos.
Además, debemos preservar la propia autoestima a pesar de las posibles frustraciones, hay que controlar los impulsos, regular nuestro estado de ánimo, mantener la armonía en la familia y sobre todo enseñar a nuestros hijos a ser empático con los demás.
Esto quiere decir que ser madre nos permite manejar nuestra inteligencia emocional, esto nos conlleva a tomar conciencia de nuestras emociones, a comprender los sentimientos de los demás, y sobre todo tolerar las presiones y frustraciones que soportamos a nivel familiar y laboral. También acentúa nuestra capacidad de trabajar en equipo y adoptar una actitud empática y social, que nos brindará mayores posibilidades de desarrollo personal y familiar.
¿Qué pasa cuando una Madre lleva la mayor carga emocional en la familia, además de la carga laboral?
Esta se ve atrapada por la sobre carga de responsabilidades tanto económicas como sociales, siendo la responsable de llevar y recoger al hijo, y todo lo que conlleva la vida escolar de este. Abrumada por la impotencia, de no poder ser la mejor empleada, no poder ser una mejor esposa, en el caso que tenga esposo, ni la mejor hija/nuera, y lo peor de todo es pensar que no se es una buena madre.
Es cuando se puede llenar de rabia o ansiedad, y es aquí cuando estamos bajo la influencia del sistema límbico, principalmente de la amígdala cerebral, que es la responsable de esa respuesta.
Este sistema límbico gestiona una respuesta fisiológica ante estímulos emocionales, sus funciones intervienen en la atención, en la memoria y en las emociones que transforma nuestra conducta. En otras palabras, da la motivación para la preservación del organismo y de la especie, integra la información genética y ambiental a través del aprendizaje, tiene la tarea de integrar nuestro medio interno con el externo antes de realizar una conducta.
Cuando se mantiene una carga constante de estrés, este es uno de los sistemas que más se activa provocando trastornos ansiosos y depresivos, este se puede asemejar a una bipolaridad, aumenta la impulsividad como también surgen los desórdenes alimentarios, y es aquí cuando aumenta el consumo de alcohol y sustancias, para poder lidiar con el estrés que se está viviendo.
Por este motivo les digo a los esposos, a los hijos y a todas aquellas personas que conozcan a una mujer que es madre, que en el día de las madres le permita ser ella misma, denle alegría, permitan que pueda disfrutar, sentir dicha y diversión. Expresen su amor, sus agradecimientos por tan arduo trabajo y por brindarles todos los días ese amor incondicional.
Sentirse apreciada como amada, aumenta la actividad de los centros cerebrales que inhiben los sentimientos negativos y pensamientos inquietantes, aumentando los neurotransmisores de la felicidad. Permitiendo que el organismo esté mejor preparado para encarar cualquier tarea, con buena disposición.
Porque cuidar de nuestra mente es el primer y más verdadero acto de heroísmo que podemos ofrecer al mundo.