Según datos oficiales del sexagésimo séptimo informe estadístico de la criminalidad, los días jueves y miércoles son los de “mayor incidencia” para que surjan robos. Mientras que sábado y domingo parecen ser los días más seguros para recorrer tranquilamente las calles.
En el análisis de medios utilizados se verifica que la motocicleta se encuentra presente en un 67.36% de los casos reportados.
En tanto, el 20.94% ejecutó el robo sin movilizarse en ningún tipo de vehículo. A este le sigue en tercer lugar los delincuentes que se transportan en automóviles de propiedad privada.
Para los criminales, los dispositivos tecnológicos son el principal objetivo delictivo al momento de realizar un robo. El cuerpo policial indica que dentro de las propiedades sustraídas se valida que el celular es la propiedad de mayor incidencia, representando un 44.15% de las propiedades sustraídas. Luego está el dinero, los documentos personales y el robo de motocicletas.
A pesar de los esfuerzos que realizan los organismos de seguridad, al menos 19 asaltos ocurrieron en diversas localidades de la provincia Santo Domingo durante todo el trayecto de octubre.
Uno de los casos más recientes ocurrió esta semana en los alrededores del sector Arroyo Hondo, donde resultó afectado el ex pelotero dominicano Francisco Cordero, a quien le sustrajeron una cadena, de la que aún se desconoce su valor.
La Policía Nacional aseguró que inició el proceso de investigación para identificar y capturar a los culpables de este suceso.
El pasado 28 de octubre, falsos agentes de la Dirección Nacional de Control de Tráfico (DNCD) que fingían ser miembros de esa agencia antinarcóticos, irrumpieron en una joyería ubicada en San Luis, un distrito municipal de Santo Domingo Este.
Este se convierte en el segundo caso contabilizado en un mes, luego de que un grupo de delincuentes acogiera el pasado 28 de septiembre la misma metodología en dos locales situados en Barahona dedicados al préstamo de dinero y venta de prendas.
En este mismo escenario también presentaron a un falso fiscal para engañar a las víctimas. La empresa afectada, situada en la confluencia de las calles Francisco Rosario y Tercera, del sector Colonial, es propiedad de un joven comerciante reconocido como “Argenis Oro”.
Los malhechores portaban un chaleco antibalas con identificaciones de la DNCD y armas de fuego, con las que simularon un operativo rutinario del organismo de seguridad.
Cinco individuos con un activo prontuario delictivo fueron apresados para responder ante la Justicia por el hecho.