Una niña de 5 años se recupera de peligrosas heridas en su cara tras un feroz ataque de un perro en un parque de Fort Lauderdale el pasado viernes por la tarde.
Su padre, Florian Becker, contó que estaba en casa cuando su esposa llevó a los niños a Horrt Park. Una vez allí, una mujer les ofreció acariciar a su perro, alegando que el perro era «muy bueno con los niños».
Cuando su hija se acercó al perro, Becker dijo que la niña fue muy cautelosa. Ella acarició al perro pero éste giró la cabeza y la mordió en la cara.
Becker precisa que su esposa estaba hablando por teléfono a unos 10 pies de distancia cuando vio lo sucedido, entonces dejó caer el teléfono y corrió hacia su hija.