El papa Francisco intervino en la temporada electoral de Estados Unidos con una entrevista televisiva en la que criticó las actitudes antimigrantes y las posturas conservadoras de algunas figuras católicas de derecha.
Durante la entrevista en «60 Minutes» de CBS News, Francisco calificó de «locura» el cierre por parte de Texas de una organización católica de caridad que ofrecía ayuda humanitaria a los migrantes, insistiendo en la importancia de acoger a los inmigrantes.
Además, abordó la «globalización de la indiferencia» hacia los migrantes como una «enfermedad muy fea».
El papa, desde su elección en 2013, ha promovido una Iglesia abierta a todos, incluidos los miembros de la comunidad LGBT, enfrentando resistencia por parte de los católicos conservadores.
