El cardenal estadounidense Robert Francis Prevost ha sido elegido como el nuevo Papa de la Iglesia Católica y ha adoptado el nombre de León XIV. En sus primeras declaraciones, expresó:
“Considero un honor estar cerca del Papa Francisco, apoyarlo y, al mismo tiempo, asumir con total seriedad la misión de buscar buenos candidatos para el ministerio del episcopado. También me comprometo a acompañar a los obispos en sus distintas misiones y a continuar caminando unidos, promoviendo ese espíritu de comunión que debe caracterizar nuestra labor pastoral.”
Asimismo, expresó su profundo agradecimiento a sus hermanos obispos.
“Durante más de ocho años hemos caminado juntos. Me he sentido acogido en un ambiente de fraternidad sincera, lo cual ha sido una gran bendición para todos. La fraternidad entre los obispos, la unidad que compartimos y el testimonio conjunto son motivos de gratitud.”
Dirigiéndose especialmente al pueblo peruano, Prevost recordó con emoción su historia de misión en el país:
“Llegué como misionero hace 40 años a Sulucanas, luego estuve más de 10 años en Trujillo, y tras ocho años en Chiclayo, solo puedo dar gracias a Dios por todo lo que el pueblo peruano ha compartido conmigo. Hemos trabajado unidos, celebrado la fe y enseñado juntos. Como pastor, agradezco profundamente a Dios por haberme permitido servir tantos años al pueblo de Perú.”