El presidente Luis Abinader aseguró este viernes que, para su segunda gestión de Gobierno, pese a contar el Partido Revolucionario Moderno con una mayoría de sobra cualificada para emprender cualquier reforma y en cualquier sentido, hará honor a su compromiso con el pueblo dominicano. Siendo fiel a sus convicciones, solo usará esa mayoría en beneficio del país y de la democracia.
Tras recordar que en las pasadas elecciones su partido, el PRM, obtuvo la mayoría congresual más amplia de la historia de la democracia del país, con un 77 % de los diputados y un 90% de senadores, expresó que “utilizaremos la más amplia mayoría congresual obtenida hasta ahora, no para servirnos de ella, sino para servir a la democracia y al pueblo dominicano. Así entiendo yo el ejercicio del poder y mi obligación con él”.
Al pronunciar su discurso con motivo de la juramentación para su segundo mandato, el presidente Abinader anunció que el próximo lunes 19 estará presentando al Poder Legislativo el anteproyecto de ley que convoca la Asamblea Revisora, para introducir en la Constitución el blindaje que imposibilite que ningún gobernante en el presente ni en el futuro pueda eternizarse en el poder más allá de los dos periodos que hoycontempla nuestra Constitución.
“La reelección indefinida ha sido una causa de inestabilidad política que ha afectado a la democracia y al desarrollo, no sólo en nuestro país, sino en toda América Latina y en otros lugares del mundo. Por eso, esta reforma será la primera de todas las que introduciremos, porque es necesaria, para garantizar la estabilidad política, económica y social para alcanzar el pleno desarrollo”, sostuvo.
Expresó que, como siempre ha dicho, en democracia, el cargo público más importante es el de ciudadano, que es quien tiene el poder compartido de elegir el futuro.
El jefe de Estado consideró que cada generación tiene su derecho de elegir y ser elegida y que por eso cree que no hay mayor acto que un gobernante pueda hacer para fortalecer la democracia, que autolimitarse en el ejercicio del poder.
Si bien país ha disfrutado de estabilidad política reciente, indicó, no es menos cierto que los aprestos de reformas constitucionales, con el único interés de la reelección del gobernante de turno, han puesto en muchas ocasiones en riesgo la paz y amenazado la estabilidad económica, política y social.
El gobernante expresó con mucha satisfacción que, de ocupar los peores lugares, República Dominicana ha pasado a estar entre los países de la región mejor evaluados por los organismos internacionales en cuanto a la lucha contra la corrupción y el clientelismo y a estar entre los primeros en transparencia, legitimidad del Estado e independencia de la justicia.
Asimismo, se ha convertido, según el último índice de Chapultepec, en el primer país del continente en respeto a la libertad de expresión y libertad de prensa.
Afirmó que las reformas que está emprendiendo en este periodo de gobierno están dirigidas a profundizar en la calidad de la democracia haciendo las instituciones más eficientes y austeras y garantizando la independencia y la separación de poderes.
Ministerio Público independiente, sin injerencias políticas
“Por eso también consagraremos en la Constitución un mecanismo de elección del Ministerio Público independiente, que lo consolide como una institución que ejerza sus funciones sin injerencias políticas y con imparcialidad, para luchar contra la impunidad que nos ha debilitado como democracia en el pasado. La independencia del Ministerio Público que impusimos por convicción propia estos últimos años ahora será una obligación constitucional”, manifestó el presidente Abinader.
Y agregó: “Queremos más democracia, más institucionalidad y mejor representatividad. Y en todo ello vamos a seguir trabajando”.
El presidente Abinader enfatizó que este será un periodo de transformaciones que seguirán cambiando la República Dominicana y dijo que a la reforma constitucional seguirán otras de gran trascendencia encaminadas a fomentar el bienestar de los ciudadanos y a sentar las bases de un desarrollo sosteniblepara el país.
