La Asociación de Bancos Múltiples (ABA) afirma que la República Dominicana se está posicionando entre los países con mayores controles en la prevención del lavado de activos y el financiamiento del terrorismo. Solo en 2022, la banca dominicana realizó inversiones por RD$1,800 millones en recursos tecnológicos y en la capacitación del personal para mitigar riesgos.
Lidia Ureña, la primera mujer en presidir el Comité de Prevención de Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo (Coplaft), un organismo especializado de la Federación Latinoamericana de Bancos (Felaban), ofreció el dato y detalló la importancia de conocer e identificar a los nuevos «sujetos obligados» para evitar caer en situaciones involuntarias.
Ureña explicó que, entre los nuevos sujetos obligados, se han identificado a las cooperativas y a los agentes de cambio como los sectores más vulnerables, con los que se está trabajando intensamente.
Además de los delitos precedentes, la ley también incluye a los sujetos obligados, tanto financieros como no financieros, y considera la evasión de impuestos como lavado de dinero.