La ministra de Justicia británica, Shabana Mahmood, ha ampliado una prueba piloto de castración química voluntaria a criminales sexuales a otras veinte prisiones de todo el país. La ministra ha destacado los resultados positivos por ahora y ha abierto las puertas a aprobar la castración obligatoria.
Este proyecto, aún en fase de discusión, se basa en un experimento iniciado en 2022 en varias prisiones del suroeste de Inglaterra, donde se ofrecen tratamientos inhibidores de la libido de forma voluntaria.
«El informe recomienda continuar con el proyecto piloto de tratamiento farmacológico para gestionar los trastornos del deseo sexual problemático», dijo Shabana Mahmood a los diputados.
«Iré más lejos con un despliegue nacional, empezando en dos regiones y cubriendo 20 prisiones. Y estoy estudiando la posibilidad de hacer obligatorio este sistema», añadió.