El recién elegido presidente de Bolivia, Rodrigo Paz, se prepara para asumir el poder en medio de una de las peores crisis económicas de las últimas décadas.
Con un 54,5% de los votos en un histórico balotaje frente al derechista Jorge “Tuto” Quiroga, el líder de centroderecha se dispone a anunciar sus primeras medidas de contención para enfrentar la escasez de combustible y la recesión heredadas tras casi 20 años de gobiernos del Movimiento al Socialismo (MAS) de Evo Morales y Luis Arce.
“La economía no da de comer. Lo que da de comer es el derecho al trabajo, instituciones fuertes y seguridad jurídica”, declaró Paz al conocer los resultados. “Trabajaremos para que Bolivia recupere su lugar en el escenario internacional”, añadió.
El nuevo mandatario asumirá el 8 de noviembre, en una transición acelerada. Nacido en España durante el exilio de sus padres, proviene de una reconocida familia política: su padre, Jaime Paz Zamora, fue presidente entre 1989 y 1993. Economista de formación, con estudios en relaciones internacionales, el joven mandatario representa una generación moderada que busca conciliar crecimiento con estabilidad institucional.