Eso es lo que promete Max More, el director general de alcor, una compañía que dice que es posible congelar a un muerto y resucitarlo cuando se conozca la cura del cáncer o se pueda revertir el envejecimiento.
Estos empresarios están cobrando cerca de 200 mil dólares a todos aquellos que tienen la esperanza de volver a la vida luego de haber muerto.
Es lo que se conoce como criogenia humana y el el avispado empresario explica que hay dos opciones, congelar el cuerpo o solo congelar el cerebro sin extraerlo del cráneo.
Y recomienda que al momento del fallecimiento el equipo médico esté presente para de inmediato iniciar el proceso de enfriamiento del cadáver. Se reinicia la respiración y la circulación y se le administran 16 medicamentos diferentes para evitar que la sangre se coagule y cuando el cuerpo llega a las instalaciones ubicada en Arizona, se sustituye la sangre con anticongelantes médicos y se introduce en un tanque con nitrógeno a 196 grados bajo cero.
Aquí se detiene el metabolismo y se espera el tiempo que sea necesario, 20 años o 100 años, no importa, usted permanecerá frizado hasta que se tenga el medicamento o el procedimiento quirúrgico disponible para su curación y
¡ya! usted esta listo para ser resucitado.
Pero no crean que toda la comunidad científica está de acuerdo con este procedimiento. Por ejemplo. El presidente de la organización nacional de trasplantes, Rafael Matesanz, dice que es un “embuste” porque una persona o está viva o está muerta. No se ha demostrado nunca, ni siquiera en animales, que se pueda volver a la vida” si este es un buen punto a considerar, pero quizás Matesanz olvida que una parada cardíaca irrecuperable está legalmente muerta, pero no es así, está viva y se le extraen los órganos para donar, si esa persona hubiese tomado la decisión de que se le congele, probablemente tendría un chance de volver a vivir. Supuestamente, ya han congelado a 150 personas y otras tantas han firmado los acuerdos para ser criopreservados cuando mueran.
Valeria Udalova , directora general de otra compañía de criogenia humana, explica que tienen en el congelador a 52 cadáveres y 22 mascotas en sus instalaciones cerca de Moscú. y cobran 36 mil dólares por congelar todo el cuerpo y 18 mil por el cerebro.
Otro científico que dice que esto no tiene sentido es el español Juan Carlos Izpisúa, investigador del Instituto Salk de California especialista en células madre, regeneración de tejidos y generación de órganos humanos en animales.
Asegura que estamos todavía empezando a saber cómo podemos congelar y preservar una célula , imagínese un órgano” y aun mas frontal expresa “ si usted congela un filete putrefacto, cuando lo vuelva a descongelar seguirá siendo putrefacto. “ Estamos hablando de algo que no tiene sentido” pese a estas advertencias, son muchos los que optan por la criogenia humana, porque entienden que gastarse esos dolaritos en esa lotería no es nada… total, ya uno se sacó el premio mayor en las afueras de Jerusalén, Lázaro de Betania, hermano de María y Marta de Betania…solo con una diferencia, no fue congelado, sólo atendió al llamado del mayor sanador de todos los tiempos, el nazareno, cuando le grito ¡Lázaro, levántate y anda!
