¿Debo entregarme a los demás en cuerpo y alma? estoy de acuerdo porque eso es compromiso verdadero, muchos entregan solo el cuerpo y la relación se convierte en un mero intercambio de sudores, sábanas y griterios… otros solo entregan el alma y la habitación matrimonial se convierte en una especie de santuario, monasterio o lugar para rezos y ronquidos.
Repito. Estoy de acuerdo con entregarse por entero, pero con una condición, primero tengo que entregarme en cuerpo y alma a mi primero y esto lo digo sabiendo que muchos piensan que es una idea egoísta. y ¡si! lo es…. es una idea egoísta, pero un egoísmo diferente, sano, realista. empezando porque nadie puede dar lo que no tiene.
Pero… ¿porque algunas personas reaccionan incómodas cuando digo esto? lo primero es que nuestra cultura rechaza
El amor propio y nos adoctrina para que nos sacrifiquemos por los demás al punto de autocastigarnos.
Pero veamos esto un poco más adentro y así descubriremos lo que se esconde detrás de toda esta visión engañosa:
1) Nos entregamos a los demás, olvidándonos de nosotros por una necesidad de ser amados y queridos. Es simplemente una carencia, por eso sentamos a los otros en la mesa principal y nos conformamos con las migajas.
2) Tenemos una visión positiva del sufrimiento. es bueno sufrir. La vida es sacrificio. nos creemos que mientras mas nos sacrificamos por el otro, mas amamos. ¡Tonterías! quien a dicho que es bueno sufrir, hemos venido a esta tierra maravillosa a disfrutar los dones del padre. La vida no es sufrimiento, la vida es desafio, oportunidades, retos, disfrute, gozo.
3) Hemos comprado la idea de que el sufrimiento es una muestra de entrega, devoción, sacrificio, inmolación por el otro. Justamente, por esta idea equivocada es que muchos esconden sus talentos, su alegría. ¡despierten ¡ ya es tiempo de levantar el amor propio o si quiere llámelo egoísmo realista y bueno, ¡perfecto!
4) Que cada quien que cargue con su cruz. el padre nos ha encomendado que cuidemos de alguien y ese alguien eres tu. No te equivoques en eso, porque son muchos los que se aprovechan de mil maneras para convertirte en su Simón El Cirine, mientras ellos van silbando por la vida. Jesús lo dejó bien claro “ el que quiera venir conmigo, que cargue con su cruz y me siga”.
“Me duele esa esposa o ese marido que se desvive por su pareja y no recibe nada a cambio. que se esta creyendo…. ¿que he nacido solo para servir?
!Exija reciprocidad en el trato!
Escuchen bien ¡reciprocidad” conviértala en una regla de vida. Simplemente, no puedo sacrificarme por alguien que no mueve un dedo o que me maltrata o me desconsidera. si doy cariño, quiero recibirlo también, si doy atención, quiero de lo mismo.
No se conforme con menos o estarás bajo el dominio de una mentalidad de escasez. en donde me acostumbro a recibir cada día menos y menos… ¡Pues no, no, no… ¡La vida es abundante, y debemos exigir parte del pastel que nos corresponde y a quien no le guste, porque siempre se ha beneficiado de nuestro sacrificio, consideración, renuncia, generosidad ¡ que diga lo que quiera…!Incluso que somos egoístas… ¡no importa! porque hemos decidido que ya es tiempo de que el otro cargue con su propia cruz.
¡Despierten ¡y pongan en practica un egoísmo realista y bueno, porque ¡si! soy egoísta…¿y?