La modelo y conductora de televisión, la dominicana Jenn Quezada, ha revelado en sus redes sociales una situación personal que millones de personas sufren y lo mantienen oculto por temor a la vergüenza, bochorno o daño al amor propio.
“Lo digo con el corazón en la mano: la depresión no es un juego, eso hace mucho daño y duele mucho”.
Admite que amenazó a su pareja con suicidarse y que se había negado a expresarse para evitar burlas al tiempo que agradece a dios no haber
Consumado el atentado contra su vida.
Escuchemos parte de sus expresiones…
“No estoy loca, estoy sufriendo de insomnio, ansiedad y depresión a la vez. Tres cosas que pueden acabar con la vida de cualquier persona en un segundo”,
Y Jenn Quezada… tiene toda la razón, porque la depresión es como un perro negro, mortífero que al morderte no se desprende hasta llevarle al extremo del dolor psicológico.
Y pensar que muchos sin cabeza se burlan de su estado de vulnerabilidad con estúpidos comentarios de que Jenn Quezada estaba borracha en ese momento o que solo busca sonido o que está loca.
Jenn aléjese, no responda a esas opiniones de bestias con el corazón negro, este es un tiempo muy difícil para usted y debe dar los pasos correctos para superar esos odiosos y peligrosos síntomas de la depresión.
1) Lo primero es que usted reconozca que la depresión es un trastorno del estado de ánimo que requiere de una evaluación psiquiátrica inmediata. no trate de salir sola ya que las alteraciones y sentimientos de tristeza, asociados a alteraciones del comportamiento y del pensamiento podrían ponerla ,como ya le ha ocurrido, en una situación de riesgo para su vida.
2) Recupere el sentimiento de satisfacción y control de su vida sin involucrar a seguidores de sus redes sociales. este es un momento en donde usted no dispone de las herramientas necesarias para afrontar el rechazo o la crítica social.
3) Y sepa también que usted recuperará su funcionamiento normal con el tratamiento adecuado, junto a la medicación podrá identificar creencias y comportamientos negativos y estar en pleno dominio para reemplazarlos por otros más realistas y saludables.
¡Hágame caso, Jenn Quezada! y usted verá cómo se recupera de esos sentimientos de desesperanza, ese terrible insomnio y esos pensamientos extremos, ese drama ilusorio que se monta en su cabeza y esa visión de catástrofe que aniquila.
Si hace lo correcto, usted Jenn Quezada, conseguirá que el perro negro de la depresión la suelte y vuelva a su vida normal. ¡bendiciones ¡ ¡ todo saldrá bien!
