El 4 de agosto de 1962, hace exactamente 61 años, la vida de Marilyn Monroe llegaba a su fin en condiciones tan tristes como misteriosas. Llegó a ser una de las máximas estrellas de Hollywood y una de las mujeres más hermosas del mundo. Pero también debió convivir con duros momentos personales.
Nació el 1 de junio de 1926 con el nombre de Norma Jeane Mortenson. Luego se cambió el apellido por Baker y finalmente por Monroe, que era el de soltera de su madre.
Creció sin padre nunca lo conoció ni supo quién era, y con una madre que padecía una enfermedad psiquiátrica. Esto la llevó a vivir en distintos orfanatos, de los que solía buscar la manera de escapar.
Su belleza natural, su carisma y su personalidad magnética la llevaron a obtener sus primeros trabajos en cine, en papeles secundarios y menores. En cuestión de poco tiempo, se volvió una de las mayores estrellas de Hollywood y una de las actrices más icónicas de todos los tiempos.
