Manifestantes pro-palestinos instalaron tiendas de campaña y colocaron falsos cadáveres ensangrentados afuera de la casa de Sarah Hubbard, presidenta de la junta de gobierno de la Universidad de Michigan.
La protesta, que involucró a unos 30 manifestantes, ocurrió a las 6 a.m. en Okemos, a 100 kilómetros del campus de Ann Arbor.
Hubbard informó que los manifestantes dejaron una carta en su puerta y colocaron tiendas y otros objetos en su jardín, mientras cantaban y tocaban un tambor, perturbando la tranquilidad del vecindario.
La policía llegó aproximadamente 30-45 minutos después, pero no se realizaron arrestos. Los manifestantes abandonaron tres tiendas y falsos cadáveres envueltos en sábanas.
El grupo de manifestantes en el campus de Ann Arbor está demandando que la universidad deje de invertir en empresas con vínculos con Israel. Sin embargo, la universidad afirma que tiene menos de 15 millones de dólares invertidos en fondos que podrían incluir empresas en Israel, lo que representa menos del 0,1% del patrimonio total.
Hubbard declaró que el asunto está resuelto y que la protesta no fue libertad de expresión, sino una escalada peligrosa.
Por otro lado, la coalición pro-palestina en redes sociales prometió seguir luchando por una Palestina libre, instando a Hubbard a negociar cara a cara en el campamento en el campus.
La universidad condenó las tácticas utilizadas en la protesta y no ha revelado planes para desmantelar el campamento en el campus, creado en abril. Hubbard expresó su preferencia por que los manifestantes se retiren voluntariamente.