Unas 1.200 personas fueron evacuadas este fin de semana a las afueras de Los Ángeles (California, EE.UU.) por un incendio forestal que se propagó rápidamente debido a los fuertes vientos.
El incendio, del que solo se ha contenido el 2 %, ha quemado ya unos 12.200 acres (4.941 hectáreas) y obligado, ante su avance, al cierre de la reserva Pyramid Lake a los visitantes.
Los funcionarios de Parques Estatales de California evacuaron a 1.200 campistas del área recreativa de Hungry Valley.
Las autoridades continúan investigando las causas del incendio, en cuyas labores de extinción participan más de 300 bomberos y aviones cisterna.
El fuego comenzó el sábado en el área de Gorman, al noroeste de Los Ángeles, se desplazó hasta la reserva Pyramid Lake, que fue clausurada a los visitantes, y amenaza ahora una importante autopista de Los Ángeles.