Las autoridades del Ayuntamiento de Santiago de los Caballeros repudiaron la acción del hombre que profanó la imagen del general Gregorio Luperón, al escalar la estatua ecuestre del prócer y hace un llamado a la Policía Nacional a cumplir con su deber.
El cabildo de Santiago responde a la acción cometida por Yeudi Santos, residente en el sector Pekín en Santiago que el pasado domingo en la apertura del carnaval, con botella de ron en manos subió a la estatua.
Debido a esta acción, la Policía Nacional estando en el lugar no actuó para detenerlo. Sin embargo, el cuerpo del orden informó ayer que Santos fue apresado y se encuentra en el palacio de Justicia para fines de ser sometido.
El ayuntamiento consideró que la regulación del orden en cualquier actividad pública descansa en la autoridad de la Policía Nacional, un cuerpo armado creado para, entre otras funciones, establecer el orden en la población dominicana, salvaguardando vidas y propiedades.
Asimismo, las autoridades municipales cuestionaron que “la Policía Nacional, teniendo como misión mantener las condiciones necesarias para el libre ejercicio de los derechos ciudadanos, a través de sistemas planificados de prevención e investigación bajo la autoridad competente, para el control del crimen, el delito y las contravenciones que permitan salvaguardar la seguridad ciudadana en todo el territorio nacional”, no se corresponde con la actitud asumida por miembros de esa institución.
De igual manera, criticó que el cuerpo del orden no puso en práctica dicha misión, ya que, para un evento, cuya apertura fue anunciada para el pasado domingo, esa institución demostró que no planificó nada para hacer frente a acciones como la cometida por el individuo que profanó la estatua del general Gregorio Luperón y que tampoco fue apresado.
El consejo de Santiago reiteró su apoyo a las festividades del Carnaval de Santiago y llamó a la Policía Nacional, para que a través de sus miembros despliegan operativos que garanticen el orden, no solo en el carnaval, sino en cualquier acto público, para que la ciudadanía se sienta segura y confiada y que actos bochornosos como el ocurrido el pasado domingo no se repitan.